
En un despliegue sin precedentes de medidas preventivas, la Defensa Civil de la República Dominicana anunció la clausura de 266 balnearios a nivel nacional durante el feriado de Semana Santa, con el objetivo de preservar la vida humana y garantizar la seguridad ciudadana en este periodo de alta movilidad.
La iniciativa, coordinada en conjunto con las autoridades municipales y organismos de socorro, se ejecutó con firmeza en todo el territorio nacional, incluyendo el Gran Santo Domingo y provincias como Santiago, La Vega, Puerto Plata, La Altagracia, Samaná, Monte Cristi, Barahona, entre muchas otras.
Los balnearios clausurados comprenden playas, ríos, pozas, manantiales y canales de reguío que han sido identificados como de alto riesgo debido a condiciones geográficas peligrosas, alta afluencia de personas o falta de condiciones adecuadas para el baño.
En el Gran Santo Domingo, por ejemplo, fueron cerrados sitios emblemáticos como Playa San Souci, Playa Manresa, el Río Ozama, la Playa Guibia y otros puntos de alta concurrencia como El Dique de Manoguayabo y la represa del Higüero.
Asimismo, en Santiago se restringió el acceso a zonas como la Presa de Taveras, Presa de Bao, y balnearios naturales a lo largo del río Yaque del Norte.
En la región Este, localidades turísticas como Juan Dolio, La Romana, La Altagracia, El Seibo y San Pedro de Macorís también vieron restringido el acceso a balnearios populares como Playa El Macao, Playa Las Cabullitas, y varias zonas del Río Soco y Río Chavón.
La lista es extensa e incluye también lugares del Cibao, sur profundo y regiones fronterizas, destacando el cierre de puntos como el Salto de Jimenoa en Jarabacoa, la Playa San Rafael en Barahona, y la Playa El Morro en Monte Cristi.
Estas clausuras forman parte del Operativo Semana Santa 2025 “Conciencia por la Vida”, que busca prevenir tragedias en un período donde históricamente aumentan los incidentes por ahogamiento y accidentes en áreas acuáticas.
Las autoridades hicieron un llamado a la ciudadanía a respetar las medidas y abstenerse de visitar estos lugares clausurados, recordando que la vida humana está por encima de cualquier actividad recreativa.
Con estas acciones, el Gobierno reafirma su compromiso de velar por la seguridad de los dominicanos, promoviendo una Semana Santa de reflexión, paz y, sobre todo, sin pérdidas que lamentar.