13 de febrero de 2025

Por: Cristian Gómez

No hay otro nombre dado a los hombres en que podamos ser salvo sino en el nombre de Cristo Jesús. Nadie viene al padre sino por mi sentenció el mismo Jesús durante su paso por la tierra.

Jesús nació en Belén aldea de Judea gobernaba Herodes el grande en Judea, en el año 753 de la fundación de Roma durante el reinado de Octavio Augusto en Roma.

Herodes el grande ante la noticia de la venida del mesías decretó matar todos los niños menores de dos años.

La llegada de Jesús al mundo cambio el curso de la historia y se comenzó y decir, antes y después de Cristo.

El revolucionó al mundo con su prédica de amaos los unos a los otros, contraria a los ojos por ojos y dientes por diente del pasado.

La vida pública de Jesús se inició a los 12 años cuando apareció en el templo discutiendo con los maestros y escribas de ese tiempo, logra do el asombro de los mayores por su sapiencia.

Luego reapareció a los 33 años habiendo un intervalo de los 12 a los 33 que inició su ministerio poderoso y sobrenatural, nunca visto por los hombres, caminó sobre las aguas, sanó enfermos, dio vista a los ciegos.

Asimismo, levantó el paralítico, curó la lepra etc con solo decir una palabra, lo que causó la sensación de ese tiempo y dijo ser el hijo de Dios, por lo cual ganó el título de blasfemo y condenado a muerte por Pilato y Herodes el tetrarca, así concluye la vida de Jesús, colgado en un madero, por los pecados de la humanidad.

Si ripostar y solo expresó » padre perdónalos porque no saben lo que hacen» y expiró.

El prometió que vendría a salvar al mundo. Y todo aquel que confiesa a Jesús, recibirá la vida eterna. Jesús es el rey de Reyes y señor de señores, en cual podemos ser salvo.

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