Steph Curry, estrella de los Golden State Warriors, afirmó que estará “listo” para disputar este viernes el cuarto partido de las Finales de la NBA, después de sufrir una dolorosa torsión en un pie en el tercer encuentro de la serie, perdido 116-100 en el TD Garden contra los Boston Celtics.
“Voy a estar bien. Me duele un poco, pero estaré listo para el viernes. Es lo mismo que me pasó contra Boston en temporada regular, espero que no sea tan grave. Parece una torsión en el pie (izquierdo)”, afirmó Curry en la rueda de prensa posterior al partido, que vio a los Celtics tomar ventaja 2-1 en las Finales.
“Aprovecharé las próximas 48 horas para estar listo”, prosiguió. Curry se lesionó en un choque con el dominicano Al Horford peleando por un balón dividido a falta de cuatro minutos para el final, cuando su equipo iba perdiendo 110-98.
Su pie se quedó bloqueado bajo el peso de Horford y Curry acabó tendido al suelo gritando por el dolor, antes de ser sustituido en los últimos dos minutos por el técnico Steve Kerr.
Curry aseguró que todavía no había vuelto a ver la jugada y que por esa razón no sabe decir si el choque “se podía evitar».
“En esas situaciones lo único que quieres es quitar el pie de allí. Pero no es tan grave como podía parecer”, concluyó. Curry anotó 31 puntos, con seis triples, en el Garden, pero su equipo perdió 116-100 frente a unos Celtics guiados por Jaylen Brown, con 27 puntos, nueve rebotes y cinco asistencias, Jayson Tatum, con 26 puntos, seis rebotes y nueve asistencias, y Marcus Smart, con 24 puntos.
En rueda de prensa también habló Draymond Green, quien definió demasiado “blanda” su actuación. Increpado durante todo el partido por la afición del Boston Garden, que le reprocha su juego físico, al límite de las reglas, Green dijo que le motiva este tipo de ambiente. “Me gusta que se me pite. (…) Es algo que me gusta, pierden muchas energías hablando de mí, es bueno. Estoy ansioso por el viernes”, aseguró.