EFE
Washington, Estados Unidos
Estados Unidos ha entregado hasta ahora 6.800 permisos humanitarios para venezolanos y al menos 490 beneficiarios ya han entrado al país como parte del nuevo programa migratorio para los ciudadanos de ese país, informó este jueves a EFE un portavoz del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés).
El Gobierno de Joe Biden lanzó el pasado 18 de octubre este programa que busca frenar la llegada de inmigrantes venezolanos a la frontera y contempla entregar 24.000 permisos humanitarios a quienes cumplan ciertos requisitos y deportar a México a todos los que crucen la frontera de forma irregular.
El portavoz aseguró que durante las dos semanas de aplicación del programa, los cruces irregulares «se han reducido sustancialmente», al pasar de una media diaria de 1.100 a unos 300 en la actualidad.
Además, el portavoz aseguró que el Gobierno de Panamá también «ha notado una reducción importante» en el número de venezolanos que tratan de cruzar la selva del Darién, uno de los puntos más peligrosos de la travesía hacia Estados Unidos.
«Los venezolanos que traten de cruzar la frontera sur de Estados Unidos de forma ilegal serán regresados a México y serán descartados para participar en el programa», advirtió la fuente del DHS.
El proceso para aplicar a uno de los 24.000 permisos se hace a través de internet y los solicitantes necesitan un patrocinador con estatus legal en Estados Unidos que demuestre suficientes recursos económicos para apoyarlos durante dos años.
Del programa están excluidos los venezolanos que hayan sido deportados de Estados Unidos en los últimos cinco años, cruzado de manera irregular la frontera con México o entrado también de manera irregular a Panamá o México.
Según cifras del 31 de octubre, 6.800 venezolanos que hicieron el trámite legal han recibido la aprobación para entrar a Estados Unidos y 490 han llegado al país en una semana, dijo la fuente del DHS.
«Los datos demuestran que cuando existe una forma legal y ordenada, las personas son menos proclives a poner su vida en manos de los traficantes de personas», expresó el portavoz.