25 de mayo de 2025

 

Dependiendo de los cálculos, había pasado al menos una década — posiblemente dos o más desde que un espectáculo de esta categoría había llegado a los Entrenamientos de Primavera de los Mets.

Cuando el dominicano Juan Soto salió de su coche en las instalaciones de la escuadra de Nueva York, fue recibido por un camarógrafo que había estado vigilando la escena desde las 6:30 a.m.

Horas después, cuando Soto salió del clubhouse para caminar hacia uno de los terrenos de práctica, casi dos docenas de miembros de los medios, fotógrafos y personal del equipo lo estaban siguiendo.

Un miembro de la agencia de Soto, la Corporación Boras, estuvo presente para acompañarlo durante todo el día. Incluso mientras Soto estiraba, cientos de fanáticos se agrupaban junto a una reja para verlo.

“¡Bienvenido al equipo!” gritó uno de los aficionados. “¡Tráenos la gloria!”

Aquí, a mediados de febrero, con su viaje de 15 años con la organización apenas comenzando, para Soto sólo algunas cosas están al alcance.

Eventualmente, el dueño Steve Cohen le dijo durante sus negociaciones de contrato, la esperanza es ganar varias Series Mundiales durante el tiempo de Soto en el equipo de Queens

Pero estos primeros días de los Entrenamientos de Primavera se tratan más de e“Hay muchas más cámaras”, dijo el manager de Nueva York, el venezolano Carlos Mendoza. “Tan pronto pisó el terreno, se dirigió hacia la jaula, se podía sentir su presencia.

Y cuando entró a batear con todos los muchachos que estaban allí… todas las miradas estaban sobre él. Era un ambiente de: ‘Bueno. Ya está aquí”.

La multitud que había seguido a Soto por la mañana finalmente entró al estadio para ver sus primeras prácticas de bateo, que incluyó todo el trueno que varios anticipaban.

Casi de inmediato, Soto envió una bola casi por encima del fondo del bateador sobre el jardín central. Luego, parecía estar molesto con su swing en un batazo que también se voló la cerca.

“Simplemente es un monstruo”, dijo el coach de bateo Jeremy Barnes.

Al menos en la historia reciente, los Mets no han tenido muchas presentaciones como esta. La llegada del puertorriqueño Francisco Lindor en el 2021 fue sin duda, un gran evento, pero ocurrió a la sombra de la pandemia del coronavirus, en terrenos de prácticas mayormente vacíos.

Los coches deportivos y los caballos de Yoenis Céspedes crearon un espectáculo en los Entrenamientos de Primavera la década pasada, pero el cubano no era un nuevo integrante de los Mets en ese momento, y sus actividades se realizaron principalmente en áreas restringidas.

La última vez que la simple presencia de un jugador causó una conmoción de esa clase pudo haber sido en el 2008, cuando el venezolano Johan Santana llegó mediante un canje durante el apogeo de de su carrera, señalado como un salvador de la franquicia.

Al igual que Santana, Soto se une a uno de los mejores equipos en todo el béisbol.

El hecho de que esté aquí insinúa que la escuadra de Nueva York simplemente debe ser mejor en el 2025 de lo que fueron el año pasado, cuando estuvieron a dos victorias de conquistar el título de la Liga Nacional.

 

About Author

Deja un comentario