El 6 de febrero, PAWA Dominicana (Pan American World Airways Dominicana) se acogió a la nueva Ley Nº141-15 de Reestructuración y Liquidación de Empresas y Personas Físicas Comerciantes y presentó la solicitud de quiebra al Tribunal de Reestructuración Mercantil del Distrito Nacional de Santo Domingo, que recientemente, emitió opinión favorable para que se inicie el proceso.
En este trámite, la compañía estuvo representada por Eckert Seamans Cherin & Mellott, LLC (Filadelfia) y Guzmán Ariza Abogados (Santo Domingo), estudio que asistió a la empresa en materia corporativa, financiera, laboral, litigios, seguros, impuestos y gobierno.
Guzmán Ariza explicó que, tras obtener sentencia favorable para iniciar el proceso, se designó al conciliador del caso. Agregó que en la etapa de conciliación se revisarán las posibilidades de iniciar un proceso de reestructuración o de liquidación de la aerolínea.
Dijo que el proceso de quiebra involucra a cientos de acreedores nacionales e internacionales. La empresa afronta reclamos por un monto de USD 69 millones con instituciones públicas y empresas privadas.
Fabio Guzmán Saladín, socio del bufete, comentó:
La principal característica del caso es que es el primero en la historia de la República Dominicana que seguirá el proceso de la nueva Ley de Reestructuración, siendo extremadamente delicado por las diferentes instituciones públicas y privadas involucradas de los diferentes países involucrados”.
El 1º de febrero, la línea aérea dominicana se declaró en bancarrota tras la suspensión de su certificado de aeronavegación y consecuente suspensión de operaciones por 90 días, tomada el 27 de enero por la Junta de Aeronáutica Civil de ese país, ante el incumplimiento de pago de las tasas y servicios aeronáuticos y aeroportuarios.
En noviembre, Aeropuertos Dominicanos Siglo XXI (Aerodom) había suspendido algunos servicios a la aerolínea en el Aeropuerto Internacional de Las Américas por la acumulación de deudas. La publicación refirió que la suspensión de operaciones no solo se debió a las deudas que tiene la empresa con organismos del Estado, sino a la falta de mantenimiento de su flota.
La medida dejó varados a 17 mil pasajeros. En un comunicado publicado en su sitio web la empresa informó a los viajeros que buscaba soluciones junto a las autoridades dominicanas. A los viajeros con pasajes comprados para volar en las semanas siguientes ofreció reembolsarles lo cancelado.